la magnifica

cuadros con luces, llaveros, medallas, rosarios, imanes para heladera, estampitas, playeras, imagenes multitamaño, velas en vasos multicolores, pulseras, escapularios, platos, tazas, altarcitos, posters, carteles psicodelicos y todo los objetos que ud. se puede imaginar, portan la imagen de la magnifica en el mercadito que forma un corredor de 100 metros antes del atrio de america y de las basilicas de guadalupe. las basilicas son dos: la original/antigua, que data del pasaje del siglo XVII al XVIII y hoy esta practicamente vacia (aunque san judas tadeo tiene un puesto privilegiado ahi), y la nueva, construida en 1976, de apariencia absolutamente kitch y considerada un icono arquitectonico para quienes fueron vanguardistas en los setentas. la imagen de la virgen de guadalupe (patrona de mexico, emperatriz de america) es increiblemente estetizable y poderosa. por cierto, quiero ser considerada con el angelito/querubin que esta debajo de ella sosteniendola, quizas sea el mas famoso de su especie y me cae muy simpatico en todas sus versiones. no debe ser facil ser quien sostiene a la magnifica y pasar la mayoria del tiempo absolutamente desapercibido. la fuerza que tiene la imagen de guadalupe se extiende a todo el santuario y el atrio. hay una energia entre bizarra, electrizante y espeluznante en toda la villa guadalupana. los fotografos saben captar muy bien esas ondas y concentrar toda la simbologia religiosa mexicana en sus mini-escenarios que sirven de fondo a las fotos de turistas y locales (claro que tengo una, posando con laura cucu). la misa que se celebra en el interior de la basilica que funciona tienen un alto contenido emotivo y los sermones giran en torno a la virgen. el pasaje mas emocionante es cuando el sacerdote anfitrion pide que se levanten todos los objetos que la gente tiene en los que se ve la virgen para bendecirlos. increible la cantidad de estatuitas, cuadros y afines que surgen en las alturas de la multitud (tengo su estampita bendecida, mariana walks). esta misa es diferente a otras que vi. hay numerosos arreglos florales con formas de lo mas estrafalarias a los costados del altar (por ej.: un autobus, ofrenda del sindicato de conductores de camiones -colectivos- del df), familias enteras sentadas en el piso haciendo picnic y escuchando lo que se dice, señoras limpiando impetuosamente el piso con unas escobas gigantes y posmodernas, numerosos turistas sacando fotos, veinte confesionarios vacios y muchisima gente comulgando. asumo que el contacto con guadalupe no pasa por los sacerdotes, pero si por la iconografia. tambien por las palabras. sobre la puerta principal de entrada a la basilikitch se lee: "no estoy yo aqui que soy tu madre?" (palabras que le habria dicho la virgen a juan diego en 1531 y que resuenan en mi cabeza con tono absolutamente altisonante, y hasta un poco agresivo). dar vueltas en circulo parece ser la clave para hacer la visita. la srta. cucu y yo no podiamos salir del lugar. cuando lo logramos, decidimos regresar con la excusa de que nos faltaba ver algo. al lado del tianguis guadalupano hay otro fijo que se especializa en productos religiosos y afines. tambien hay unos puestos de comidas en los que recomiendo preguntar los precios antes de comer y, una vez hecho eso, comer guaraches de costilla con queso. en la caminata por esta zona, visualizamos a un joven de extraña profesion: "crucificador reincidente de cristo". el joven tenia un pilon de cruces de madera rustica y una montaña de cristos. su tarea, realizada mecanicamente, consiste en apoyar una cruz sobre el piso, agarrar unos clavos, ponerselos en la boca, apoyar un cristo en la cruz, tomar el martillo con firmeza y clavar a cristo en la cruz. cuando los cristos eran pequeños, parecia no tener problema. al rato, le toco crucificar cristos de un tamaño considerablemente mayor. casi por pudor, cubria los cuerpos cristianos con un trapo blanco. vaya tarea la de asumir las cruces suyas de cada dia. flash total ver a este joven. cuando iba cayendo la tarde, y luego de prender las veladoras en el quemador de guadalupe y frente a san judas tadeo, hicimos las compras de rigor. tengo en mi haber un arsenal de objetillos con guadalupe. los mas destacados: cuadro psicodelico con luz roja, playeras con la magnifica y llavero-destapador de birras callejeras para el sr. steed. he sumado, por lo menos, treinta sensaciones coloridas a mi estancia en el df. cada vez es mas dificil la idea de la partida.